Alberto Anaya, dirigente del Partido del Trabajo, ha sostenido desde hace tiempo que Corea del Norte es el modelo que México podría imitar. La cárcel norcoreana le parece envidiable. Esa dictadura que no pierde el tiempo con elecciones y que no se distrae con las trampas del bienestar es una guía para México y para el mundo.
Estudió Derecho en la UNAM y Ciencia Política en la Universidad de Columbia. Es profesor de la Escuela de Gobierno del Tecnológico de Monterrey. Ha publicado El antiguo régimen y la transición en México y La idiotez de lo perfecto. De sus columnas en la sección cultural de Reforma han aparecido dos cuadernos de Andar y ver.