No es fácil emprender un canon personal de la literatura nuevoleonesa, por lo que la mejor opción fue elegir entre autores vivos. Lamenté que Dulce María González y Ricardo Elizondo quedaran fuera, pero había que ser estrictos en los criterios. Un día, en el canon definitivo, quizá queden dentro. En la de hace 10 años estuvieron incluidos: Letras regias a la carta.