Está tan raro el asunto que llama poderosamente la atención. Ustedes, amables lectores, han de pensar que hablamos de la obra de ciencia ficción que son las finanzas personales del Sr. López: no gastos, no deudas, ningún ingreso fuera del sueldo (siendo que escribió un libro que él mismo dijo que le generaría hartas ganancias y cuyos ingresos no reporta), cero inversión y una cartera personal vacía, salvo un escapulario.