Entre los muchos conspiradores que andaban en conciliábulos e intrigas hubo un grupo que no sabemos cómo ni cuándo comenzó a reunirse en el oratorio del templo de San Felipe Neri, que antes se había llamado la Casa Profesa de la Compañía de Jesús. Después de juntarse ahí los conspiradores, que aparentaban estar en oración en la pequeña capilla, se iban levantando uno por uno, pero en lugar de salir a la calle pasaban al interior del templo, a la celda que en él tenía el superior del templo y encargado de los ejercicios espirituales, el padre Matías Monteagudo.
Armando Fuentes Aguirre, "Catón". Nació y vive en Saltillo, Coahuila. Licenciado en Derecho; licenciado en Letras Españolas. Maestro universitario; humorista y humanista. Sus artículos periodísticos se leen en más de un centenar de publicaciones en el País y en el extranjero. Dicta conferencias sobre temas de política, historia y filosofía. Desde 1978 es cronista de la Ciudad de Saltillo. Su mayor orgullo es ser padre de cuatro hijos y abuelo de 13 nietos.