¡Pobre México! ¡Tan lejos de Dios y tan cerca de los propios mexicanos! En cuatro facciones se había dividido el país en aquellos aciagos días de septiembre de 1855. El presidente interino, don Martín Carrera, contaba con los generales que mandaban la guarnición de la capital, lo mismo que con los que seguían fuertes en los estados del centro del país. Álvarez, Comonfort y los demás revolucionarios de Ayutla dominaban en Guerrero, Jalisco y Veracruz, y amenazaban ya el mismísimo estado de México. Vidaurri controlaba Coahuila, Tamaulipas y Nuevo León. Otro grupo, encabezado por don Antonio de Haro y Tamariz, se había adueñado de San Luis y amagaba a Zacatecas.
Armando Fuentes Aguirre, "Catón". Nació y vive en Saltillo, Coahuila. Licenciado en Derecho; licenciado en Letras Españolas. Maestro universitario; humorista y humanista. Sus artículos periodísticos se leen en más de un centenar de publicaciones en el País y en el extranjero. Dicta conferencias sobre temas de política, historia y filosofía. Desde 1978 es cronista de la Ciudad de Saltillo. Su mayor orgullo es ser padre de cuatro hijos y abuelo de 13 nietos.