Vivimos la era del desprecio: desprecio por la vida humana, con toda la violencia que nos azota, desprecio por las leyes por parte de nuestros gobernantes, tercos en hacer lo que la ley les prohíbe, como promover el voto a favor de AMLO cuando estamos en VEDA, y complementado lo anterior con el desprecio por el capital extranjero por nuestros valores gubernamentales y privados.