OPINIÓN

El terco don Venustiano

LA OTRA HISTORIA DE MÉXICO / Catón EN EL NORTE

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Carranza, que con astuta pachorra de ranchero estuvo observando la marcha de los acontecimientos, se dio clara cuenta de que los aires soplaban ahora en favor de la revolución de Madero. Se unió entonces a ella con mucha decisión. Pero jamás fue maderista. Una sola cosa en su vida fue Carranza: carrancista.