OPINIÓN

Tras oponerse a ella por considerarla contraproducente y absurda, terminará siendo uno de los más entusiastas defensores de la reforma judicial

En el pantano

Jorge Volpi EN EL NORTE

3 MIN 30 SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Cuando recibe la llamada de la Presidenta instándolo a convertirse en fiscal general de la República, el magistrado en retiro Arturo Pereda -uno de los juristas más respetados del país- lo considera una reivindicación por tantos años de trabajo honesto, tenaz y paciente en la judicatura. Desde la nueva posición que se le ofrece podrá contribuir a que en el país por fin se implante un auténtico Estado de derecho. Él jamás coqueteó con la política, a la cual siempre vio con desdén o suspicacia, y ni siquiera simpatiza con Yatziri Sabanero, la primera mandataria del país, y su movimiento enfocado en "recuperar la grandeza de México", pero la posibilidad de pasar a la historia y de culminar su carrera con semejante encargo lo llena de esperanzas.