Las expectativas que la ciudadanía nos hacemos del gobierno y de los gobernantes generalmente están determinadas por 1) las promesas de campaña, 2) las experiencias pasadas, y 3) por la trayectoria y el trabajo previo de los políticos. En un contexto "postpandémico" y de inflación, las decisiones que toman los gobernantes impactan fuertemente en el humor, en la economía y en la satisfacción de la ciudadanía con el gobierno, el gobernante, los partidos, con el sistema político: con la democracia.