Cada vez son más las parejas que deciden no tener hijos, por lo que algunos padres pueden generar una pena de la que no se habla. Crédito: Freepik
Lydia Birk, de 56 años, conserva su ejemplar favorito de El conejo de terciopelo desde que sus tres hijos, que ahora tienen entre 20 y 30 años, eran pequeños.