La otra cara de CM Punk

Cuando a inicios de 2014 CM Punk se aventó un discurso en el que criticaba la manera en que WWE protegía a sus estrellas y le negaba el paso al nuevo talento, en un programa televisado de la propia empresa, todo el mundo se le entregó.

Es cierto que el Punketo se estaba convirtiendo en figura, pero esa manera de enfrentar a los directivos le hizo ganar millones de adeptos.

Se convirtió en el irreverente, el rey del pueblo, en David luchando contra Goliath... y perdió, fue congelado primero y luego despedido.

Por siete años los aficionados estuvieron esperando su regreso, por eso cuando en 2021 AEW anunció que volvería a los cuadriláteros los fans del nacido en Chicago se volcaron a las arenas y a las pantallas para verlo.

Pero como que algo nunca cuajó, no era el mismo ni con el micrófono ni en su accionar, aún así, el público se le entregó.

Surgieron muchas historias alrededor de su paso por AEW, que si era prepotente, que no hacía buen vestidor, que tenía problemas con el talento, que no respetaba a los directivos, en fin.

El pasado 2 de septiembre, AEW despidió a CM Punk por pelearse en los vestidores, pero sobre todo por intimidar al gerente general de la empresa Tony Khan.

Entonces afloraron más historias, ahora de su época en WWE con los mismos temas, problemas de vestidor y no saber respetar.

Fue raro que en siete años nadie lograra tentarlo para regresar, o quizás su fama de belicoso era tan grande que nadie se aventó a hacerlo y fue hasta que una empresa nueva como AEW apostó por él.

Lo cierto es que el presente y futuro de Punk en la lucha libre luce muy complicado, y de las MMA ya ni hablar, porque cuando tomó ese camino, le fue muy mal.

Todo parece indicar que la verdadera cara de Punk es la del que no sabe hacer grupo, pues nunca salieron compañeros a pedir que se quedara.

Vamos, broncas adentro de un vestidor hay en todas las empresas, algunas son hasta épicas, si no me creen pregúntenle a Jericho, Rayo de Jalisco, Canek, Sangre Chicana y un larguísimo etcétera.

Seguro que a todos los castigaron, pero no los corrieron, el promotor no se queda sin sus estrellas.

Aquí es donde me late que ya nadie aguantaba a Punk y sus presentaciones tampoco eran de gran impacto en la taquilla o en el rating de TV, y por eso no les costó darle las gracias.

No por nada Seth Rollins tachó a CM Punk de ser un cáncer para la lucha libre.

Hablando de AEW, Rush ya se nos puso bien violento y promete hacer de Los Ingobernables el grupo más desalmado, sanguinario y rudo de la empresa, sin duda este estilo puede ser más llamativo y ayudar al Toro Blanco a consolidarse en Estados Unidos.

Mañana en la Arena México me llama la lucha de relevos increíbles entre Lluvia y Stephanie Vaquer ante La Jarochita y Zeuxis, no huele, apesta a traición.

Y ya me voy, Lana está de regreso en los cuadriláteros, ya debutó en AEW y quiere unas clases de rudeza para que no me la agarren de bajada y quién soy yo para negarme a ayudarla.

Ahí nos vemos y recuerden... Soy un lujo, pero lo valgo.