En la Virgen de Guadalupe reside una de las más hondas raíces de nuestra nacionalidad. Sólo en ella encarnó de manera cabal eso que se ha llamado "encuentro de dos mundos". Ni india ni española es la Gualupita, sino mestiza, como nosotros somos. A Juan Diego la Virgen le habló en idioma mexicano, pero los que recién habían llegado también entendieron sus palabras, y ahora la Virgen de Guadalupe es uno de los más claros símbolos de este país, fusión de dos culturas.
Armando Fuentes Aguirre, "Catón". Nació y vive en Saltillo, Coahuila. Licenciado en Derecho; licenciado en Letras Españolas. Maestro universitario; humorista y humanista. Sus artículos periodísticos se leen en más de un centenar de publicaciones en el País y en el extranjero. Dicta conferencias sobre temas de política, historia y filosofía. Desde 1978 es cronista de la Ciudad de Saltillo. Su mayor orgullo es ser padre de cuatro hijos y abuelo de 13 nietos.
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