En Parras muchos recuerdan con afecto al Tuti Vidaña, tenor de aquellos que cantaban enlazando los dedos de las manos para hacer fuerza y conseguir un do de pecho. Gustaba el Tuti de hacer ostentación de su arte. Parras, por desgracia, tendía a un arte más popular, y así las arias del Caruso local no eran muy solicitadas. En las tertulias familiares se entonaban los boleros de Lara, las canciones de Curiel o Arcaraz, pero la clientela de Verdi y de Puccini tendía a ser escasa.
Armando Fuentes Aguirre, "Catón". Nació y vive en Saltillo, Coahuila. Licenciado en Derecho; licenciado en Letras Españolas. Maestro universitario; humorista y humanista. Sus artículos periodísticos se leen en más de un centenar de publicaciones en el País y en el extranjero. Dicta conferencias sobre temas de política, historia y filosofía. Desde 1978 es cronista de la Ciudad de Saltillo. Su mayor orgullo es ser padre de cuatro hijos y abuelo de 13 nietos.
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