OPINIÓN

MISCELÁNEA DE HISTORIAS / Catón EN EL NORTE

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MIRADOR

 

La joven madre dio a luz un hijo.

Todos le dieron los parabienes por haber traído al mundo un niño tan hermoso. La joven madre estaba llena de felicidad.

En la aldea vivía un hombre diestro en adivinar el porvenir.

La joven madre le preguntó:

-¿Qué será mi hijo cuando crezca?

El hombre cerró los ojos para ver mejor, y luego respondió:

-Será poeta.

La joven madre, entonces, se echó a llorar, y exclamó llena de dolor:

-¡Pobre hijo mío!

¡Hasta mañana!...

 

 

PRESENTE LO TENGO YO

 

Vamos a echarnos unas cheves.

Para eso es el calor.

 

Robertito Guajardo es el joto más famoso en toda la historia de Saltillo, y vaya que los ha habido en competente cantidad. Dios lo tenga en su santo reino. Ahí seguramente está, pues fue muy bueno y sufrió mucho. No sé si los jotos de hoy sufran igual, pero los de antes sufrían bastante. Ni doña Sara García sufría como ellos. Por eso casi ninguno salía del clóset. Se pasaban toda la existencia ocultando su verdadera identidad. En el momento supremo de la muerte congregaban en torno de su lecho a toda la familia -mujer y 14 hijos-, y en presencia del sacerdote revelaban el tremendo secreto de su vida:

-Fui joto.

El sacerdote se consternaba entonces.

-Mi general, me deja usted estupefacto.

Robertito Guajardo sí salió del clóset. También salía a barrer la calle con bata color de rosa, de mujer, y pantuflas de peluche azul. Eso se llama salir.

Antes de salir del clóset, sin embargo, Robertito Guajardo fue socio del Casino. Y es que tenía dinero, y venía de buenas familias. Nadie en el Casino, sin embargo, sabía que Robertito era mujeringa. De haberlo sabido habrían tenido que hacer una junta para determinar si lo expulsaban o lo hacían Reina de la Primavera.

En aquellos años -hablo de los treintas del pasado siglo- en el Casino se organizaba cada año un lucidísimo baile de carnaval. Había concurso de disfraces, y siempre lo ganaba Robertito con un espléndido disfraz de Rey Gambrinus que cambiaba cada año, y con el cual cada año volvía a ganar. ¡Qué lujo el de aquel disfraz! Robertito encargaba brocados, sedas, terciopelos, encajes que le llegaban desde Europa vía la Capital o San Antonio, Texas. Un día adornó su manto real con auténtico armiño. Aquello fue una cosa muy de verse.

Ahora bien: ¿quién era ese tal Rey Gambrinus del disfraz? El tema de este artículo no son los jotos, sino la cerveza, por eso es obligado hablar de él.

Gambrinus fue un rey flamenco. Aquí en Saltillo a los jotos se les llamaba también "flamencos", pero Gambrinus no era joto, era de Flandes, de ahí lo de flamenco. En realidad no se llamaba así. Su nombre de rey era Juan Primero. Jan Primus. Gambrinus. De ese nombre salió el de Gambrinus.

Jan Primus vivió entre 1261-1294. A él se atribuye la invención de la cerveza. La atribución es falsa: ya los egipcios conocían 5 mil años antes de Cristo ese divino néctar, y hay jeroglíficos diversos que muestran a diversos personajes egipcios en actitud de beber cerveza tras cerveza y de levantarse luego de la mesa para ir al baño en el momento de pagar la cuenta.

No inventó la cerveza el rey Jan Primus -Gambrinus-, pero sí formó en Bruselas la primera organización de cerveceros que se conoció en el mundo, y se hizo nombrar su presidente. Un anónimo pintor lo retrató vestido con su atavío real y levantando en alto un bock lleno hasta arriba del ambarino líquido.

Mañana diré cuáles son, según los conocedores, las mejores cervezas del mundo, y cuáles entre las mexicanas ocupan los mejores sitios en la opinión de esos expertos.

 

EL ÚLTIMO DE CATÓN

 

Don Senecio, maduro señor de ya muchos octubres, casó con Amantina, pimpante chica de 28 abriles. Al empezar la Noche de bodas, ya reclinados ambos en el ara donde celebrarían el rito connubial (NOTA DE LA REDACCIÓN: Nuestro estimable colaborador quiere decir "la cama"), don Senecio clava una penetrante mirada en su flamante mujercita -quizás ése iba a ser el único clavar que habría en la noche- y le pregunta con solemne acento: "-Dime, Amantina: ¿eres virgen?". Ella observa la desmedrada traza de su esposo y le contesta: "-¿Por qué? ¿Quieres que te haga algún milagro?".

 

 

MANGANITAS

Por AFA

 

"... Carne de burros salvajes se usa para hacer carne seca...".

 

Todo eso es mentira pura.

¿Burros salvajes? Falso es.

Yo comí carne una vez

y me encontré una herradura.