Hay un platillo que no sólo se cocina... se le mira, se le mima, y llega un punto donde hay que dejarla a que ella misma se termine de hacer: junta la granja y el palacio, la Fiesta Brava con Picasso y con Valencia. Reúne a toda la familia el domingo, día de misa y fiesta... todo eso y mucho más es la paella.