En tres cuerpos dividió Morelos su pequeño ejército para hacer frente al ataque de los realistas que lo acometían. Uno lo encomendó a don Nicolás Bravo, el otro a Lobato, y él mismo asumió el mando del tercero. Bien pronto se trabó el combate. Los insurgentes resistieron al principio la furiosa embestida de sus enemigos, pero de pronto el ala izquierda encomendada a Lobato cedió, y los realistas penetraron por entre las líneas insurgentes como cuchillo en mantequilla. Sucedió que un hombre, un solo hombre, de nombre Pedro Páez, se acobardó, y poniendo espuelas a la mula que montaba se echó a huir al tiempo que gritaba:
Armando Fuentes Aguirre, "Catón". Nació y vive en Saltillo, Coahuila. Licenciado en Derecho; licenciado en Letras Españolas. Maestro universitario; humorista y humanista. Sus artículos periodísticos se leen en más de un centenar de publicaciones en el País y en el extranjero. Dicta conferencias sobre temas de política, historia y filosofía. Desde 1978 es cronista de la Ciudad de Saltillo. Su mayor orgullo es ser padre de cuatro hijos y abuelo de 13 nietos.