Son ya demasiados catorrazos, demasiada destrucción.<BR><BR>Y no, amigos, no nos referimos al descocoche en KABUL, Afganistán.<BR><BR>Más bien nos referimos al ambiente ríspido, ácido, peleonero, lleno de descalificaciones, ataques personales y supuración de agravios y resentimientos personales...