Esta semana se llevará a cabo la penúltima reunión de política monetaria del año. La expectativa es que el Banco de México reduzca la tasa de interés de referencia en un cuarto de punto porcentual, ubicándola en 10.25%. El argumento que utilizará el banco será el mismo que se empleó en la reunión anterior: el avance de la inflación subyacente, que es el indicador más efectivo para medir la política monetaria.