OPINIÓN

Se espera un milagro

Juan Villoro EN EL NORTE

4 MIN 00 SEG

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Hace poco visité en Puebla el templo del beato Aparicio, que desde hace 424 años concede favores a sus feligreses, especialmente los motorizados. El célebre franciscano fue creador de caminos y medios de transporte. Aunque también es patrono de los charros, su principal influencia se cumple sobre ruedas, según comprobé cuando vi al capellán en la banqueta de la iglesia, bendiciendo un Chevy con un hisopo.