"Apreté dos veces el timbre y enseguida supe que me iba a quedar. Heredé de mi padre, que en paz descanse, estas corazonadas". Así comienza el cuento "Corazonada" de Mario Benedetti, y así nos acordamos al entrar al restaurante La Corazonada, que desde un inicio nos dejó en claro que nos íbamos a quedar.